101tv Sevilla

Juzgan a unos padres por vender a su hija para casarla con otro menor con una fiesta en Sevilla

Este miércoles, la Audiencia Provincial de Madrid lleva a juicio a unos padres de origen rumano acusados de vender a su hija de 12 años a un matrimonio compatriota con la intención de que la menor conviviera con el hijo de la pareja en una relación conyugal. Los padres enfrentan una posible condena de siete años de prisión. Inicialmente, la menor fue casada el 24 de junio de 2021 en Rumanía y posteriormente trasladada a Madrid. El 17 de septiembre de 2021, la menor fue llevada a Sevilla para celebrar nuevamente el enlace en España.

El Ministerio Público acusa a los padres de un delito de trata de seres humanos con fines de servidumbre. Según el fiscal, los padres acordaron entregar a su hija al matrimonio a cambio de una suma de dinero, cuyo monto no se ha determinado. El propósito era que la menor viviera con el hijo de la pareja en una relación matrimonial aceptada por haber sido educada en la creencia de que era lo normal y lo esperado de ella.

La menor, quien vivía en Alemania con su madre, estuvo bajo el control del matrimonio, que planeaba traerla a España para vivir con ellos, separándola de su familia biológica y dejándola sin escolarización. La menor no hablaba español y nunca antes había estado en España.

El 22 de junio de 2022, después de someter a la menor a una prueba para comprobar su virginidad, fue obligada a tener una relación similar a un matrimonio con el hijo de los acusados, incluyendo relaciones sexuales completas. La menor aceptó esta situación debido a su educación y creencia de que era lo normal y esperado de ella.

Al día siguiente, los padres de la menor acudieron a una notaría en Rumanía para declarar que su hija viviría con M.R. y autorizaron a la menor a viajar al extranjero acompañada por la acusada hasta 2024.

Posteriormente, el 24 de junio de 2021, se celebró en Rumanía una gran fiesta para conmemorar el matrimonio de los dos menores. Dos días después, la pareja que compró a la menor la trasladó desde Bucarest a Madrid y la alojó en un apartamento en Mejorada del Campo.

Desde entonces y hasta la fecha del registro realizado el 4 de octubre de 2021, la menor no asistió a la escuela, compartía habitación y cama con el joven y mantenía una relación similar a un matrimonio. Además, su documentación, como el pasaporte y la partida de nacimiento, estaban en posesión de los padres del joven y no tenía un teléfono móvil personal. Salía poco de la casa y, cuando lo hacía, siempre estaba acompañada por los acusados o el joven.

Otras noticias de interés

Sevilla, ciudad de cine

De nuevo a prisión provisional el varón investigado por violar y amenazar a su hija

Redacción Sevilla

La Audiencia pregunta a los acusados de Magrudis si declararán al inicio o al final del juicio