El grupo municipal socialista tiene la intención de plantear una pregunta en la próxima Comisión Especial de Control y Fiscalización del Gobierno para que el equipo dirigido por José Luis Sanz aclare si tiene previsto o no ejecutar la partida presupuestaria destinada a iniciar los trabajos técnicos para la exhumación de los restos de la fosa común Monumento del Cementerio de San Fernando. Esta pregunta surge tras la finalización de la exhumación en la fosa de Pico Reja con la participación de todas las administraciones públicas.
Según ha explicado el concejal socialista Juan Tomás de Aragón en un comunicado de prensa, esta pregunta es pertinente debido a que el Partido Popular ha eliminado la Oficina de la Memoria Histórica, que era responsable de coordinar los trabajos de exhumación y la atención a los familiares de las víctimas de la represión franquista. También se teme que se incumplan los compromisos adquiridos con las entidades memorialistas para continuar con las exhumaciones de las fosas comunes documentadas en el cementerio sevillano.
Entre los años 2016 y 2017, el Ayuntamiento de Sevilla delimitó y señalizó tres grandes fosas, incluyendo Pico Reja, Monumento y Antigua, basándose en los estudios del historiador José Díaz Arriaza. Una vez finalizados los trabajos en Pico Reja, el objetivo era iniciar el proceso para la exhumación de la fosa Monumento a partir de los estudios técnicos que se llevarían a cabo en este año 2023, utilizando la partida presupuestaria asignada.
Durante los últimos tres años, el Ayuntamiento y los especialistas de la empresa Aranzadi han llevado a cabo la exhumación en Pico Reja, realizando un rastreo de las evidencias de represión, clasificando los restos humanos, extrayendo su ADN y custodiándolos hasta que se encuentre coincidencia con las pruebas biológicas de los familiares. El trabajo de cotejo corresponde al laboratorio del Departamento de Medicina Legal, Toxicología y Antropología Física de la Universidad de Granada. Los restos se han inhumado en un osario-memorial y se han encontrado restos de 1.786 personas represaliadas durante la guerra civil y el franquismo, convirtiendo esta fosa común en la más grande de España y una de las mayores de Europa Occidental desde la de Srebrenica en Bosnia Herzegovina.
Juan Tomás de Aragón ha recordado que esta exhumación fue un proyecto conjunto con la colaboración financiera de todas las administraciones, incluyendo la Diputación, la Junta de Andalucía y la Administración central, independientemente de sus ideologías políticas, ya que se considera un acto de justicia histórica.