El jueves, el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, se reunió con la junta directiva de la Asociación de Hoteleros como parte de sus encuentros con el sector.
Durante la reunión, según un comunicado del Ayuntamiento, ambas partes abordaron la problemática de los apartamentos turísticos. Sanz expresó su intención de «devolver el centro histórico de la ciudad a los sevillanos», limitando los alojamientos turísticos y estableciendo un plan de turismo efectivo y gestionado de manera eficiente.
En el mandato anterior, el Ayuntamiento impulsó una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que equiparaba las viviendas turísticas al servicio terciario, lo que implicaba que estarían sujetas a las mismas condiciones y requisitos de implantación y ubicación que los hoteles, hostales, pensiones y apartamentos turísticos.
Sin embargo, esta regulación municipal fue impugnada por la Consejería de Economía, Hacienda y Fondos Europeos ante la sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). Según la Administración autonómica, esta normativa local imponía «restricciones graves e injustificadas de forma desproporcionada, violando los principios básicos de la Ley de garantía de unidad de mercado y la jurisprudencia de la UE, además de contravenir el interés general». Recientemente, la Administración autonómica anunció una regulación para toda Andalucía que permitirá a los municipios imponer limitaciones en esta materia «en función del interés general».
Además, durante la reunión entre José Luis Sanz y la patronal hotelera se discutieron «formas de promover la ciudad, así como impulsar y fortalecer la marca Sevilla» en otros ámbitos.
