El arqueólogo municipal de Carmona, Juan Manuel Román, ha destacado la importancia del curso de arqueología de campo de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) como «una excelente oportunidad» para que los alumnos adquieran experiencia en el campo de la arqueología.
Román, quien dirigirá el curso junto con Ricardo Lineros, jefe de Servicio de la Delegación de Patrimonio Histórico del Ayuntamiento de Carmona, ha resaltado que este es uno de los cursos de mayor duración que ofrece la UPO durante el verano.
El objetivo principal del curso es brindar a los alumnos una experiencia completa en los distintos aspectos que enfrenta un arqueólogo durante una excavación. Para ello, se imparte una formación práctica en la que los estudiantes participan en una excavación, aprendiendo sobre la metodología utilizada en estas intervenciones, técnicas de documentación y registro de contextos arqueológicos, identificación y tratamiento de materiales, así como la realización de planimetrías.
Además de la formación práctica, el curso incluye clases teóricas en las que se profundiza en temas relacionados con los trámites administrativos y documentación necesarios, la digitalización del registro, la fotogrametría y la arqueología paramental.
Los estudiantes también tienen la oportunidad de visitar lugares patrimoniales de Carmona, como la Puerta de Sevilla, la Puerta de Córdoba o el Conjunto Arqueológico de la ciudad.
Juan Manuel Román ha resaltado la satisfacción de los alumnos que han participado en ediciones anteriores del curso, muchos de los cuales han repetido en más de una ocasión. Considera que esta formación proporciona una valiosa experiencia, especialmente en el trabajo de campo, lo cual será fundamental para el desarrollo profesional futuro de los estudiantes de arqueología.
