Con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, la diputada de Vox en el Congreso por Sevilla y vicepresidente nacional de VOX, Reyes Romero, ha considerado que la Agenda 2030 de desarrollo sostenible ante las amenazas climática y de pobreza, que según la ONU aspira a resolver «las necesidades de los más pobres y vulnerables» y combatir las «desigualdades», permitiendo que cada país fije sus metas según sus «retos específicos»; es en realidad un factor causante del aumento de la pobreza.
Reyes Romero ha señalado que la Agenda 2030 de las Naciones Unidas en pro de un desarrollo económico compatible con la preservación del medio ambiente «impide explorar los recursos naturales» más allá de los ya aprovechados y «cierra centrales nucleares», en alusión a la determinación del Gobierno central en funciones del PSOE y Unidas Podemos de que en 2035 hayan sido desactivadas las cinco centrales nucleares españolas, para potenciar las energías renovables, el hidrógeno verde o el biometano.
Para Romero, tal extremo obliga a «importar energía de otros países», agregando que «en una provincia eminentemente agrícola y ganadera como es Sevilla», donde reina una sequía agravada con las reservas de agua por debajo del 20% el conjunto de Andalucía y las repetidas olas de calor extremo, «las políticas de fanatismo climático están dejando a muchos agricultores sin recursos».
Reyes Romero también puntualiza que «cada vez hay más personas que viven solas y los defensores de esta agenda liberticida, en vez de promover políticas que favorezcan a las familias», en un marco en el que una de cada tres personas en situación de pobreza tiene un empleo pero su salario no alcanza para una subsistencia digna, «atacan a la familia implantando medidas para destruirla, empezando por enfrentar a padres contra hijos, introduciendo barbaridades en los sistemas educativos», según opina.
«Es evidente que las personas somos más fuertes cuanto más fuertes y estables son nuestras familias. Por eso, el globalismo nos quiere débiles y desarraigados y se aprovecha de que las personas solas son más vulnerables y manipulables», considera.
Para finalizar, tras las medidas estatales de creación del ingreso mínimo vital y de subidas del salario mínimo interprofesional, Romero ha opinado que «la izquierda habla mucho de defender a los desfavorecidos, cuando en verdad aplican políticas elitistas que perjudican a los más humildes».