Tras seis años y medio vistiendo la camiseta verdiblanca, el centrocampista y capitán, Andrés Guardado, se marcha del Real Betis Balompié para regresar a México y fichar por su nuevo equipo, el Club León.
El mexicano de 37 años se ha convertido en una pieza clave en el vestuario, no solo por su liderazgo y veteranía, sino también por convertirse en el jugador extranjero que más partidos ha disputado en el Betis. Toda una leyenda del beticismo que se ha despedido del que considera «el club de su vida». Rodeado de su familia, sus compañeros emocionados, entre ellos Joaquín o Nabil Fekir, al que le ha cedido su brazalete de capitán.
Una calurosa y emotiva despedida en la que no ha faltado el presidente Ángel Haro, el entrenador Manuel Pellegrini y Rafael Gordillo. Durante el evento, Guardado ha mandado un mensaje de agradecimiento a toda la entidad, recalcando que «esto no es una despedida» y que en un futuro podría volver al club de Heliópolis para cumplir otra función, dentro del ámbito administrativo.
