Los ganaderos se movilizan: «la lengua azul y las riadas están matando animales». Así lo asegura el sector, que ha acudido a las puertas del Parlamento de Andalucía exigiendo reuniones con los representantes políticos. Aseguran que la enfermedad de la lengua azul, está provocando la muerte de muchos animales.
Los ganaderos se movilizan: «la lengua azul y las riadas están matando animales»
Cada mañana, Miguel Ángel Muñoz, ganadero en la provincia de Sevilla, se despierta para trabajar y se encuentra la misma situación: “voy recogiendo animales muertos, y animales que están sufriendo por la fiebre que les provoca esta enfermedad”
Se trata de la enfermedad de la lengua azul. Una fiebre catarral ovina, que es una enfermedad vírica no contagiosa que afecta principalmente a las ovejas, pero también a los bovinos o las cabras, entre otros. Una dolencia que está matando animales y que ya se habían dado casos en otras zonas de Europa.
“Creemos que la solución y las vacunas están llegando tarde”
Ante esto los ganaderos se han movilizado a las puertas del Parlamento de Andalucía, exigiendo reuniones para encontrar soluciones a esta enfermedad y a otras situaciones de extrema gravedad que padece el campo. Exigen que se les escuche, “porque como no nos escuchen el campo y la ganadería desaparecen, y ¿quién nos va a dar de comer?, hemos llegado a un punto que hemos tocado fondo”, asegura Manuel Salas, representante de los ganaderos.
“Pedimos que se nos escuche, y que a estos más de 150 ganaderos que se ven arruinados, se les den lo que necesitan para que puedan seguir viviendo en sus casas. Que además de la enfermedad de “la lengua azul”, las riadas también afectan al campo, y esas nadie las escucha”, ha sentenciado Salas.
Exigen transporte para los ejemplares fallecidos
“Los animales que están en el campo, están muriéndose”, asegura el ganadero, quien ha incidido en que están perdidos y no tienen medios. “No sabemos qué hacer con los animales para poderlos socorrer. El sector del campo pide, además, ayuda para transportar los ejemplares que ya han fallecido, algo que conlleva pagar un transporte. Por ello se preguntan de dónde sacan el dinero para este transporte “si estas navidades no vamos a poder vender borregos porque están muriendo”.
Los ganaderos aseguran que la magnitud de la tragedia es tan grande que es imposible sacar a la luz cuántos centenares de animales han muerto y cuanto dinero se ha perdido. Los ganaderos se han personificado en el Parlamento exigiendo medidas urgentes, donde les han asegurado que tendrán pronto una respuesta.