Las imágenes que protagonizarán la Magna, cita que podrá seguirse en 101, están presentes en un envase de dulces conventuales. envase
Los dulces conventuales son uno de los principales reclamos gastronómicos de la Navidad sevillana. Este año, la fecha de ventas coincide de lleno con la procesión de clausura del II Congreso de Hermandades y Piedad Popular en Sevilla. Precisamente por ello, el arquitecto Javier Jiménez Sánchez-Dalp ha diseñado un envase especial para las Hermanas Clarisas de Sevilla.
Así es el envase de dulces inspirado en las devociones de la Magna
La Navidad es una de las festividades donde la gastronomía toma mayor importancia. Y en Sevilla, estas fechas huelen y saben a dulces conventuales. Un ejemplo de estos típicos postres lo encontramos cada año en el Monasterio de Santa María de Jesús.
Las Hermanas Clarisas han presentado un nuevo envase y estuche de estos dulces y el arquitecto sevillano Javier Jiménez Sánchez-Dalp ha sido el encargado del diseño de este recipiente. Jiménez Sánchez-Dalp asegura que «ha sido una ocasión muy especial para incorporar todas las imágenes de la Magna, todas esas devociones está presentes en esta caja, porque hace eco de ese día tan importante que vamos a vivir aquí en Sevilla».
La Virgen de los Reyes, el Señor del Gran Poder, la Virgen de Setefilla, la Virgen de Valme, la Virgen de Consolación, el Cristo de la Expiración del Cachorro, la Esperanza de Triana y la Esperanza Macarena , al igual que serán parte del cortejo de la Magna aparecen todas en el recipiente diseñado por Javier Jiménez Sánchez-Dalp.
Sin lugar a dudas, estos envases de dulces conventuales se guardarán en muchos hogares sevillanos para recordar que Sevilla vivió unas vísperas navideñas con pasos en las calles de la ciudad.