Alcalá de Guadaíra ha vivido una Semana Santa que se ha desarrollado con una «multitudinaria participación» en las calles, con miles de personas, que ha contrastado con «la escasez de incidencias» fruto por un lado, de la «buena coordinación» prevista en el Plan Varal y, por otro, «del comportamiento y saber estar de la ciudadanía para disfrutar de sus tradiciones a través del respeto y la convivencia», según han indicado desde el Ayuntamiento.
El Plan Varal, dispositivo de coordinación de los servicios públicos y de seguridad que aglutina las necesidades de las hermandades y del público en general para el correcto discurrir de las procesiones, incluye desde los dispositivos de seguridad y atención a la ciudadanía, el tráfico, las necesidades de vallas, iluminación, cableado, la venta ambulante, o los servicios especiales de limpieza y recogida de residuos urbanos.
Como cada año, la entrada y salida de las hermandades en los templos han sido puntos de máxima afluencia, a los que se suma la carrera oficial entre la Plazuela y la Plaza Cervantes, el Barrero y la calle Mairena, la calle La Mina o la Plaza del Paraíso, siendo más intensos los operativos de vigilancia en estas zonas.
Según han apuntado desde el Ayuntamiento alcalareño, no han destacado incidencias de mención más allá de las habituales de desvanecimientos por el calor, especialmente entre las filas de nazarenos, o las pequeñas torceduras o caídas dadas la muchedumbre. «De hecho, la buena organización y la masiva asistencia ha sido una muestra para el objetivo del próximo año de ampliar el aforo de sillas en la carrera oficial», han aclarado.
La coordinación de los servicios públicos ha permitido ofrecer a la ciudadanía unas calles en las mejores condiciones para el máximo lucimiento de las tradiciones locales, teniendo en cuenta las miles de personas concentradas o en tránsito por las mismas calle con los operativos especiales de limpieza previa, tras las comitivas, y los servicios nocturnos.
En cuanto a las mejoras de este año, una de ellas ha sido dar una mayor cobertura a los negocios de restauración de la carrera oficial reinstalando los contenedores en la calle Madueño de los Aires en las horas en que están retirados de la zona centro, para no deslucir el paso de las comitivas pero ofrecer el servicio a los negocios de la zona. Igualmente, también se ha retirado la cera día a día de las zonas más vinculadas a la carrera oficial –excepto la mañana del Viernes Santo– para facilitar el tratamiento posterior «más intensivo».
En este sentido, este lunes ha dado comienzo el operativo posterior de limpieza centrado especialmente en la eliminación de la cera en las calles peatonales o en las calzadas que puedan suponer peligro al tráfico.
Desde el Ayuntamiento se ha agradecido el trabajo del Consejo General de Hermandades y Cofradías en unión con todas las hermandades de la ciudad. La «buena meteorología» ha permitido que por primera vez las diez pudieran realizar al completo su estación de penitencia ya que, el pasado año, fecha en la que se estrenaba en la calle como Hermandad la Tercera Palabra, la lluvia no le permitió llegar a la carrera oficial y tuvo que refugiarse dado por terminado su recorrido.