El presidente de la Autoridad Portuaria de Sevilla (APS), Rafael Carmona, ha expresado su preocupación por el daño «reputacional» que está sufriendo el Puerto debido al «bloqueo» en el servicio de los prácticos, advirtiendo que será difícil reparar esta situación en el futuro.
En la actualidad, esta interrupción del servicio está afectando a nueve buques que se encuentran esperando para entrar o salir del puerto. De los doce prácticos disponibles en la instalación portuaria sevillana, solo tres están trabajando y uno de ellos se encuentra de baja médica.
En declaraciones a la Cadena SER recogidas por Europa Press, Carmona ha dejado claro que el Puerto no aceptará la «coacción» de los prácticos y sus demandas, que se centran en un aumento del 40% en las tarifas por sus servicios. Según argumentó Carmona, estos costos deberían ser asumidos por las empresas, las cuales podrían optar por utilizar otros puertos donde no tendrían que pagar esos precios más altos, ya que les resultaría más económico descargar sus mercancías y transportarlas posteriormente en tren o camiones.
«La situación es extremadamente difícil», admitió Carmona, para quien el aumento salarial solicitado por los prácticos es «muy significativo». De hecho, argumentó que un aumento del 40% en las tarifas implicaría un incremento salarial de 50,000 euros al año para ellos, situando su sueldo en 190,000 euros anuales. El Puerto explicó que su función es «regular y aprobar» las tarifas con las que los prácticos pueden operar, siendo las empresas las responsables de su pago.
«Hemos aumentado las tarifas entre un 14% y un 17%, y ellos quieren un 40%. Por un deber razonable, no podemos incrementar la tarifa en ese 40%», agregó Carmona, haciendo referencia a una posible fuga de empresas del Puerto de Sevilla y destacando que esta situación de paralización es «inédita» en la Autoridad Portuaria de Sevilla.
Carmona señaló que la acción de los prácticos es más problemática que la huelga de controladores aéreos en España, ya que en este caso se podían utilizar controladores militares u otros, mientras que en el Puerto de Sevilla no es posible recurrir a prácticos de otros puertos andaluces debido a la falta de homologación.
