El Hospital Vithas Sevilla va a repartir 3.000 botiquines de forma gratuita, así como facilitará información y consejos saludables, entre las hermandades que peregrinan a la aldea del Rocío para que puedan atender las afecciones más comunes de los romeros, como es el caso de quemaduras, golpes de calor y pequeñas heridas. Este próximo miércoles 24 de mayo, comienzan el camino las hermandades de Triana, Macarena, Sevilla y Camas.
El reparto de los conocidos como ‘botiquines del peregrino’ es ya «una tradición el día de la salida de las carretas, recibiendo así a los cientos de romeros que pasan por las inmediaciones del hospital y mostrando el compromiso e interés de Vithas por el patrimonio cultural y social sevillano», ha apuntado el hospital en una nota de prensa. Como cada año, el reparto de botiquines comienza a las 11,00 en la rotonda de entrada a Castilleja de la Cuesta (Sevilla).
El botiquín que se entrega a los peregrinos contiene diez apósitos y diferentes antisépticos. Tal y como ha señalado José Antonio Camacho, enfermero de Urgencias del Hospital Vithas Sevilla, para prepararse el camino, los romeros deben realizar las semanas previas «una actividad moderada que prepare al cuerpo para la nueva situación. Se debe planificar la actividad física para evitar problemas, así como preparamos el calzado y la ropa que llevamos. Es tan fácil como ir dando paseos semanas antes de ir, poco a poco, para adaptarse a la actividad a realizar durante la peregrinación».
Ante las posibles lesiones, junto al botiquín entregado por el Hospital Vithas Sevilla, Camacho ha añadido la posibilidad de «sumar repelente de insectos por si se produce alguna picadura o alergia. Esto junto a los apósitos, agua limpia y vendas son los elementos más básicos que pueden ayudar ante una quemadura, corte y rozadura, que es lo que más se produce en el camino».
Unas recomendaciones que este año «se refuerzan» con los consejos ante los golpes de calor, derivados de las altas temperaturas que se prevén para las jornadas de romería. Así, ante un golpe de calor «lo principal es retirar de la acción directa del sol al afectado. Debemos colocarlo en un lugar con ventilación y, sobre todo, que cese la actividad física. En estos casos, la hidratación es fundamental y esta no solo supone que haya que beber agua, sino que, puntualmente podemos mojar a la persona con líquidos relativamente fríos en las zonas de la nuca y cabeza».
Si la persona afectada continuara desorientada, «podemos poner una botella con líquidos más fríos en la zona de nuca, mientras que se llama a los servicios de emergencias», ha recalcado el enfermero del Hospital Vithas Sevilla, quien ha añadido que «si se diera una alteración de la conciencia, es decir un desmayo, es recomendable tumbar a la persona afectada y ponerla en posición de seguridad, que consiste sobre todo en recostarlo sobre el costado izquierdo».
Como recomendaciones para el día a día del camino, desde el Hospital Vithas Sevilla han recordado la importancia de mantenerse hidratados, pues como resalta José Antonio Camacho, «ya sabemos que el alcohol deshidrata, por lo que debemos beber agua y, en cuanto a las comidas, evitar que éstas sean copiosas, así como no hacer ingestas abundantes en poco tiempo. Es importante respetar espacios donde no se coma, para favorecer la digestión, así como ir repartiendo la cantidad de comida entre varias ingestas».
A la vuelta de la aldea del Rocío, «no es bueno parar el cuerpo de forma directa después de tener un aumento de la actividad. Es mejor dar pequeños paseos, sumado a una alimentación adecuada, para adaptarse al periodo de calma. Finalmente, es fundamental el descanso nocturno, el sueño es lo que repara el cuerpo de forma adecuada», ha apuntado Camacho.