El ex presidente de la Real Federación Española (RFEF) Ángel María Villar afirmó que de la federación le «echaron» y le «metieron en la cárcel» y celebró que durante su etapa las selecciones nacionales lo ganaron «todo», incluido el ‘triplete’ de las Eurocopas de 2008 y 2012 y el Mundial de 2010 en Sudáfrica, y que ahora es un «cero a la izquierda».
«De la federación me echaron, yo no quería salir, y me metieron en la cárcel. Estuve 12 días, no es agradable, pero dentro de lo desagradable, aprendes cosas. En la cárcel, me metieron en la ducha y me dieron vaselina y condones», dijo en una mesa redonda en el LIX Congreso de la Asociación Española de la Prensa Deportiva (AEPD) en el Auditori i Centre Cultural de La Nucía (Alicante).
Ángel Villar, quien estuvo presente también este lunes en la Gala Nacional del Deporte de la AEPD en la Ciudad Deportiva Camilo Cano de La Nucía, indicó que de todo ha intentado aprender en la vida. «En el fondo me he sentido querido. Tengo 73 años y he estado 60 ligando al mundo del fútbol. Lo he sido todo como jugador y como dirigente», apuntó el presidente de la RFEF durante tres décadas, desde 1998 hasta 2017.
Villar confesó que tiene «corazón de sindicalista», recordó que fundó la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y desveló que, si hubiera sido periodista, también habría sido «sindicalista».
De su internamiento en prisión, señaló que tras los reconocimientos médico y psicológico ingresó en un módulo junto al ex presidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González. «Un interno me dijo: ‘Has ganado todos los títulos, pero te falta uno, el de preso’. Pues, ya los he ganado todos», reveló.
En la ‘recta final’ de la vida, el ex responsable de la federación española de fútbol se declaró «por encima de todo». «Quiero paz de final de vida. No merece la pena pelearse. Tenemos una buena selección y me alegro muchísimo por Luis de la Fuente, que fue compañero mío y le contraté yo en las categorías inferiores de la federación», manifestó.
A su juicio, el fútbol ha subido de nivel y se felicitó por haber «elegido bien» a los seleccionadores -ocho durante su gestión- nacionales, y aunque su equipo es el Athletic Club «el mejor equipo del mundo es el Real Madrid».
La Supercopa se mueve, según él, solo por «parámetros económicos». «A nosotros también nos ofrecieron mucho dinero, pero mi opinión fue siempre que no. Yo la Supercopa la regalaba en verano (la federación ingresaba 140.000 euros) para que los aficionados vieran a los fichajes en casa. Ahora se ha convertido en un torneo a Arabia Saudita, no es una competición. Es una filosofía diferente», lamentó.
Asimismo, se mostró «totalmente» en contra de la Superliga y tildó de «actuación egoísta» el comportamiento de sus promotores porque «perjudicaría» al resto de competiciones. «No soy el alma del presidente de la UEFA. Fui presidente y nunca lo dije en aquel momento porque Platini estuvo sancionado y yo era el primer vicepresidente. No sé que opina Ceferin sobre el ‘caso del Barcelona’. No opino», comentó.
A ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros José María Enríquez Negreira le nombró en su etapa como presidente de la RFEF. «Una de las cosas importantes es la lealtad y la fidelidad. Del ‘caso Negreira’ no hablo. Porque cualquier manifestación se proyecta porque está judicializado y se puede hacer daño a seres humanos», declaró.
Actualmente, Villar se definió como un anacoreta que como «sólido» una vez al día, desayuna y cena fruta y que da largos paseos de unas tres horas diarias. «Ahora soy ya un cero a la izquierda. En 30 años me han presentado 20 acciones criminales. Sólo me queda una por resolver. No se lo deseo a nadie. Todas se han archivado. De tonto tengo lo justito. Ahora que he ganado no me voy a gastar mi dinero contra el que me ha puesto una denuncia falsa. No soy un gilipollas», indicó.
No le gusta que el VAR no deje festejar los goles de forma instantánea y anule a los asistentes. «El VAR no ha hecho el fútbol más justo. La regla es universal, pero con el VAR se rompe la universalidad porque en el fútbol no profesional no hay», comparó.
Sobre el Mundial de 2010, aparte de jugar bien, España tuvo «suerte» y afirmó que la limitación de mandatos es «mala». «El éxito genera envida y esto trae consecuencias muy indeseables para el exitoso. Conmigo lo ganamos todo, esto es éxito. De la crítica hacía una construcción. En los autos de archivo no me han devuelto ni la salud, el honor, el trabajo ni el dinero. Yo no había hecho nada. De 20 acciones, 19 se archivaron. Esa es mi verdad», subrayó.
Villar se posicionó con el ex seleccionador nacional de fútbol Luis Enrique Martínez en su relación con los medios y no se sintió molesto con su sucesor en el cargo, Luis Rubiales. «Yo entiendo a veces la reacción de Luis Enrique con la prensa. Hay periodistas que solo van a joder. A mi Rubiales no me ha hecho nada. Estoy en mi época final de vida. El que se mete conmigo el problema lo tiene él», incidió.
Para el ex directivo vasco, los cargos de presidente de la RFEF y de LaLiga son muy difíciles. «El amor y el odio no tienen conocimiento. Yo no he tenido relación con Tebas, pero si lo elige el fútbol profesional, será bueno. Eso no quiere decir que comparta con él cierto temas, que no los comparto. A mi edad no me quiero cebar. No me preocupa que ahora se ingrese más en LaLiga o en la federación», aseguró.
La definición del ‘Villarato’ lo asumió «con deportividad». «Lo que inventó Relaño era una equivocación sin fundamento. El Villarato era que los árbitros como conocían mi opinión de defensa del Barcelona no necesitaban que se les dirigiera. Y ahora se ha demostrado todo lo contrario. ¿Creéis que la actividad del arbitraje es manipulable? Es imposible. No tiene fundamento. Y no voy a hablar del ‘Relañato», concluyó.