Los hábitos de consumo se reflejan con claridad en nuestras facturas de la luz. Facturas que, según los sevillanos, se elevan por meses. Cada 21 de octubre se celebra el Día Mundial del Ahorro Energético. En la última encuesta realizada por 101, la opinión ha sido unánime: aseguran que este último mes no ha subido de manera desmesurada, pero reconocen que «sigue siendo elevada».
«No dejo nada enchufado porque eso también consume»
Es cierto que el kilovatio hora ha bajado de precio. De aproximadamente unos 0,20 €/kWh, ha pasado a estar a 0,12 €/kWh. Sin embargo esta cifra no es lo suficientemente baja para los sevillanos. El precio de la luz varía durante todo el día. Para intentar reducir sus facturas, muchos lo recomiendan: «Lo mejor es contratar una tarifa de discriminación horaria». Se trata de un tipo de tarifa que factura el consumo de luz en función de la hora del día. Para ello se basan en horas punta, horas llano y horas valle, siendo este último el tramo más barato. Una tarifa de discriminación horaria sería, por ejemplo, la tarifa nocturna, que facilita el ahorro a aquellos que concentren su actividad durante la noche.
Otros prefieren vigilar más sus costumbres y tratar de ser más atentos en el día a día. «No dejo nada enchufado porque eso también consume», nos cuenta una señora. Por otro lado, el debate de las lavadoras sigue sin tener conclusiones claras. Mientras que muchos aseguran que durante la noche es mucho más barato, el resto insiste en que es absurdo. Lo cierto es que depende del día. Este 21 de octubre, por ejemplo, el precio más bajo del día se ha dado de cuatro a cinco de la madrugada. El más alto se dará de ocho a nueve de la tarde. Cierto es que a esta hora las familias acostumbran a poner sus lavadoras por comodidad, por lo que muchos lo advierten: son las horas más caras.