En la sesión celebrada este viernes 28 de julio, la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Sevilla aprobó una inversión de aproximadamente 2,8 millones de euros para realizar obras en el centro de formación San Fernando y en el edificio municipal La Ranilla, que alberga la Delegación de Movilidad y Seguridad.
Para el centro de formación San Fernando, se destinará un presupuesto de 2,082 millones de euros (IVA incluido) y se prevé un plazo de ejecución de ocho meses. El objetivo de esta intervención es dotar al edificio y su parcela de las condiciones necesarias de seguridad, habitabilidad y funcionalidad. En el complejo, se llevarán a cabo modificaciones en la distribución de uno de los edificios, se construirá una nueva escalera con la preinstalación de un ascensor futuro, se actualizarán las instalaciones de baja tensión contra incendios, fontanería y clima, y se realizarán intervenciones en los edificios 2 y 3 para mejorar la seguridad y protección contra incendios.
En cuanto a la urbanización, se implementará un nuevo acceso que cumplirá con la normativa de accesibilidad, se modificará el vallado para hacerlo más permeable y se habilitará un aparcamiento anejo. Además, se crearán zonas ajardinadas con riego automatizado, se realizarán instalaciones de drenaje y evacuación de aguas, y se dotará de mobiliario urbano el entorno.
En el caso del edificio La Ranilla, las obras aprobadas también cuentan con un presupuesto de 2,082 millones de euros y un plazo de ejecución de ocho meses. Estas intervenciones se derivan de las quejas por parte de los usuarios sobre la funcionalidad y la falta de confort del edificio. Un informe externo detectó desviaciones técnicas y se propusieron medidas correctivas. El proyecto tiene como objetivo corregir estas desviaciones y mejorar la prestación del edificio, especialmente en las instalaciones de saneamiento, fontanería, electricidad, producción de agua caliente solar y protección contra incendios.
La principal actuación se centrará en la instalación de climatización y ventilación, con la reordenación de zonas, reubicación de maquinaria, incorporación de silenciadores, nuevos recuperadores de calor, filtros y sustitución de rejillas regulables, entre otros aspectos. También se resolverán defectos constructivos, como filtraciones en la cubierta y terminaciones deficientes de encuentros entre tuberías y muro cortina de la fachada.
Con estas obras, el Ayuntamiento de Sevilla busca mejorar la funcionalidad, seguridad y confort de ambos edificios para ofrecer mejores servicios y condiciones a los ciudadanos y usuarios.