El delegado de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera, ha confirmado que la Policía Nacional, en coordinación con el Consistorio, mantendrá medidas de control en el entorno del estadio del Sevilla en Nervión cuando haya «un riesgo alto» en los partidos que se disputen en el Sánchez Pizjuán, como fue el de este pasado jueves con el Fenerbahçe turco.
Estas medidas se mantienen motivadas por las obras de ampliación del tranvía. Cabrera ha garantizado que el dispositivo buscará hacer «compatible» la labor de la hostelería con los partidos de fútbol y «aminorar» la presencia de botellonas en los alrededores del estadio.
El delegado se ha comprometido a mantener una «comunicación máxima» con los hosteleros de la zona, a los que «adelantarán» el dispositivo que se organizará con partidos de alto riesgo. Además, ha aclarado que él estará «al frente de las negociaciones con la hostelería, como hasta ahora». Cabrera ha explicado que la preocupación por la seguridad y evacuación de personas con motivo de las obras del tranvía se le añade un riesgo más, aludiendo a los partidos en los que juegan equipos extranjeros, cuyas hinchadas deben ser controladas por las Fuerzas del Orden.
La instauración de medidas de control se enmarca dentro de las actuaciones sobre el Plan de Emergencias y Evacuación del estadio Ramón Sánchez Pizjuán acordadas en la Subdelegación del Gobierno de Sevilla el pasado día 9 de febrero con motivo de la afectación al tráfico rodado por las obras de ampliación del Metrocentro a la calle Luis de Morales, cortada al tráfico en ambos sentidos. Con la instauración de este carril de emergencias y evacuación en Benito Mas y Prat «se permite asegurar» una vía de entrada al estadio Ramón Sánchez Pizjuán a los vehículos de emergencias en caso de que acontezca alguna emergencia, ya que, hasta ahora, la vía establecida pasaba por la llegada de estos vehículos desde la avenida Luis de Morales accediendo a la calle Sevilla FC por la calle Luis Arenas Ladislao.
El concejal de Vox en el Ayuntamiento de Sevilla, Gonzalo García de Polavieja, ha criticado estas medidas al considerarlas «desproporcionadas», al tiempo que ha asegurado que han producido «sorpresa e indignación» no solo en los establecimientos de hostelería sino también en los clientes de los mismos. La presencia policial en el entorno de Benito Mas y Prat desplazó las concentraciones de aficionados bebiendo en la vía pública a calles como Divino Redentor durante el partido de la UEFA-Europa League entre el Sevilla y el Fenerbahçe.