El Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), dependiente de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, ha incorporado recientemente, tras la donación del artista Federico Guzmán Romero (Sevilla, 1954), la obra ‘Reloj estacional’, del año 2004, una instalación con elementos vegetales efímeros, que cuenta con dos versiones de montaje, y que hasta ahora ha sido un depósito regular del artista.
En esta pieza, Guzmán, partiendo de ‘Horologium Florae’ (reloj floral) ideado en 1748 por el botánico en Uppsala (Suecia), concibe un reloj botánico. El resultado es un bancal de cultivo de plantas circadianas ‘llamadas por Linneo Aequinoctales’ porque abren y cierran sus flores a intervalos regulares durante el día y la noche a lo largo de su temporada de crecimiento.
Una segunda versión de este proyecto, bajo la denominación ‘Reloj ecológico. Jardín de plantas equinocciales’, se expone actualmente en el Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A), dentro del proyecto expositivo ‘Sombra verde. Federico Guzmán y la carrera de las plantas’. Esta muestra, que puede visitarse hasta el próximo 24 de septiembre, reúne en este espacio expositivo más de 30 monumentales obras de diferentes formatos realizados en las dos últimas décadas por el escultor.
El verdor y su capacidad vital creadora, como concepto y estética, recorre toda esta exposición, desde la obra más temprana, ‘Yagé’ (2000) hasta la más reciente, ‘Himno a Gaia’ (2022). Los remedios naturales, las plantas medicinales, los efectos terapéuticos de la ayahuasca y de otras hierbas con propiedades mágicas y curativas están presentes mediante piezas realizadas en diferentes medios y formatos.
La producción del artista andaluz está presente, además, en colecciones internacionales como el MoMA de Nueva York o el Museo Boijmans van Beuningen de Róterdam; y en colecciones nacionales como el Mncars, Madrid; el Macba, Barcelona; el IVAM, de Valencia, el Musac de León, el CGAC de Santiago de Compostela o en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo.
Precisamente, en este espacio presentó en 2001 presentó su exposición Matitas divinas. En la última década ha protagonizado exposiciones individuales en el Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo (Badajoz, 2013), el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Palacio de Cristal, Madrid, 2015), San Telmo Museoa (San Sebastián, 2016), el IVAM (Valencia, 2018), la galería Juana de Aizpuru (Madrid, 2018) o la Sala Atín Aya (Sevilla, 2022), entre otras.
Federico Guzmán (Sevilla, 1954) es licenciado en Bellas Artes y formó parte del grupo de pintores jóvenes de los ochenta vinculados a la revista Figura, siendo uno de los artistas andaluces que han destacado dentro de esa gran galaxia taxonómica que es el conceptualismo, sin que por ello desterrara en un primer momento a la pintura como vehículo expresivo o, posteriormente, a otros medios tridimensionales, es decir, sin llegar a la desmaterialización del discurso artístico.
Desde hace años su preocupación, el centro temático de su producción, son las cuestiones medio ambientales, en concreto la espiritualidad o magia del pensamiento humano en la interacción con la tierra, la única certeza de su origen. Por ello, se ha interesado por culturas con un gran apego hacia la naturaleza, como el pueblo saharaui o los indios de América del sur.