El concejal socialista Juan Carlos Cabrera ha reclamado este jueves al equipo de gobierno local, que preside José Luis Sanz, que «aclare ya» y ponga en marcha «de cara a septiembre» su alternativa a los actuales separadores que impiden la invasión de los carriles reservados a los autobuses de Tussam por parte de los vehículos privados, después de su decisión «improvisada y unilateral» de retirarlos «sin tan siquiera consultar a la empresa municipal de transporte ni a los conductores».
Los separadores de carril bus, cuyo diseño es similar al existente en otras capitales, se instalaron hace dos años en puntos críticos de la ciudad donde se había constatado una «invasión frecuente» de carriles reservados por parte de vehículos privados no autorizados, atendiendo a una demanda trasladada por Tussam y en ejecución del Plan de Movilidad Urbana
Sostenible de Sevilla, que recoge este tipo de elementos para mejorar la velocidad comercial de Tussam y, en consecuencia, impulsar el transporte público, tal como recuerda el grupo socialista en una nota de prensa.
«Se colocaron en puntos muy concretos con gran afluencia de tráfico y para impedir que la invasión de coches no autorizados de los carriles reservados al transporte público dificultaran la circulación de los autobuses de Tussam. La improvisada decisión de Sanz de eliminarlos, además de evidenciar un modelo de ciudad que apuesta por el coche privado frente al transporte público, no ha sido consultada con los profesionales de Tussam, como han denunciado los propios representantes de su plantilla, al tiempo que también ha sido criticada por asociaciones del taxi, que también pueden utilizar estos carriles reservados al igual que los vehículos eléctricos y, por tanto, cero emisiones».
Cabrera ha considerado que si a Sanz no le gustan los separadores, «que presente y ejecute su alternativa, escuche a los profesionales y deje de improvisar». «Estos separadores cumplen una función concreta, están señalizados y, como cualquier otra señalización de tráfico, debe ser respetada por parte de todos los conductores para evitar accidentes motivados por intentar invadir el carril, por adelantamientos inadecuados, por excesiva velocidad sobre la permitida en el interior de la ciudad o para estacionar indebidamente», ha remarcado el concejal socialista.
«La instalación de los separadores fue una decisión técnica y adoptada de acuerdo con los técnicos de Movilidad y los profesionales de Tussam. En cambio, retirarlos ha sido una decisión meramente política», ha añadido Cabrera. El modelo ‘Madrid’ o ‘aleta de tiburón’ fue el elegido para los separadores, alternado con balizas h-75 en la cabecera y h-50 intermedios para una mejor visibilidad de estos elementos, que fueron empleados con éxito en otras ciudades españolas y que evitan, asimismo, los problemas y daños que ocasionaban los de hormigón que se usaban hace dos décadas en la capital hispalense, añade la nota de prensa.
En este sentido, ha abundado Cabrera, no se instalaron a lo largo de todo un carril bus-taxi, sino sólo en aquellos lugares o tramos donde la sección de este carril reservado permitía su adecuada implantación y donde se había observado esa «invasión indiscriminada» por parte de los vehículos privados no autorizados. «Fue el Área de Movilidad, en coordinación con Tussam, la que
determinó esos enclaves en arterias principales de la ciudad, como Kansas City, Ronda Histórica, la Avenida de Andalucía y o la Avenida de la Palmera», ha añadido el concejal socialista.
«Teniendo en cuenta la vuelta de la intensidad de tráfico en septiembre tras las vacaciones y el inicio del curso escolar, exigimos al equipo de Sanz que consulte a los profesionales y ejecute su alternativa para continuar mejorando la velocidad comercial de los autobuses de Tussam. Y si no tiene alternativa, que frene el desmantelamiento de los separadores y atienda las peticiones al respecto de la plantilla de Tussam, a la que ha ninguneado», ha concluido Cabrera.
