La fachada de la iglesia de San Gregorio en Sevilla, a simple vista, no muestra ningún desperfecto aparente. Sin embargo, al ingresar al interior, se pueden observar humedades en el falso techo de la nave principal. Esto se debe a que durante la celebración del Corpus Christi, las tejas de una de las cubiertas colapsaron y la lluvia que cayó causó que la corporación trasladara al Cristo Yacente al altar de la Virgen de Villaviciosa y cubriera con plásticos el retablo mayor y los tejados.
Los avisos sobre esta situación comenzaron a llegar a finales del año pasado, según ha señalado el arquitecto y consiliario de la junta de gobierno, Miguel Domínguez de la Concha, quien mencionó que en noviembre se percataron de que una de las cubiertas estaba cediendo, por lo que comenzaron a trabajar en un proyecto para ejecutarlo durante el verano. Sin embargo, antes de la Semana Santa, los mercedarios volvieron a advertir grietas en el techo, y con el derrumbe durante el día del Corpus Christi, la situación se agravó.
Al subir a la azotea de la iglesia junto con Domínguez de la Concha, el hermano mayor, Fermín Vázquez, y el teniente de hermano mayor, Diego José Bernal, se puede apreciar la magnitud de una costosa obra que alcanza los 50.000 euros. Debido a la complejidad y urgencia de la situación, la hermandad del Santo Entierro está solicitando ayuda económica para completar la reparación de una de las cubiertas que, según las hipótesis, ha estado expuesta a más humedad durante años y finalmente cedió, siendo el área en la que los trabajadores están interviniendo.
Las obras se llevarán a cabo durante los meses de verano, pero la hermandad del Sábado Santo necesitará financiamiento adicional para concluir las reparaciones de la cubierta afectada.
A lo largo de la cubierta, se pueden observar las vigas de madera que han sufrido deterioro en sus uniones debido a la podredumbre. Sin embargo, para solucionar esta situación, se tiene previsto instalar refuerzos metálicos, según explicó Domínguez de la Concha. Por otro lado, es importante destacar que, por el momento, el tejado que da hacia el antiguo Instituto de Estudios Hispanoamericanos no se ve afectado, pero la hermandad tiene planes de intervenir en esa parte del templo en el futuro.
Fermín Vázquez comentó que San Gregorio fue anteriormente un seminario de los jesuitas hasta que fueron expulsados en el siglo XVIII. Luego, el edificio pasó por diversas manos y, en los años 40, se construyó una casa adyacente para que funcionara como convento de los mercedarios. El máximo dirigente de la cofradía recordó que en los años noventa se llevaron a cabo algunas intervenciones que incluyeron la colocación de una malla en la nave principal. Sin embargo, enfatizó que las reparaciones en la cubierta son las más importantes y urgentes en este momento.
La hermandad ha hecho un llamado en sus redes sociales solicitando ayuda económica para financiar estas obras. Además, tienen previsto organizar eventos en el futuro para recaudar fondos. Cabe mencionar que la hermandad cuenta con un número limitado de miembros y comparte la responsabilidad del mantenimiento del templo con la comunidad mercedaria que aún reside en ese lugar de la ciudad.
Durante el recorrido por otros espacios de la iglesia, se destacó la intención de continuar mejorando otras áreas, como el muro que da hacia el jardín de la sede actual del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el cual presenta numerosas humedades debido a la capilaridad.
Tras evaluar la estructura del templo y confirmar que no existen problemas, la hermandad del Santo Entierro descarta el cierre de la iglesia. Sin embargo, aún se requiere de ayuda para afrontar las reparaciones necesarias en una de las cubiertas que ha causado preocupación en la cofradía.
Para aquellos que deseen contribuir, se han habilitado diferentes opciones de donación. Se pueden realizar donaciones a través del código Bizum 04591, o realizar transferencias a las siguientes cuentas: ES29-2100-5741-4402-00096553 a nombre de la hermandad del Santo Entierro, y ES12-0030-4116-2700-4018-3271 a nombre de la orden de la Merced.