El Sevilla Fútbol Club venció a Las Rozas CF por 0-3 superando la primera ronda de la Copa del Rey con protagonismo del delantero que llegó en verano para ser el titular, a pesar de no haber tenido casi protagonismo, y aprovechó la oportunidad para demostrarle a García Pimienta que está por la labor de revertir su situación.
No fue un partido brillante, ni mucho menos, pero se cumplió con el trámite que debía suponer imponerse a un equipo de Tercera Federación, muy inferior incluso al nivel de los canteranos sevillistas que pelean este curso dos categorías por encima. Pero esa distinción abismal de nivel no se vislumbró hasta bien avanzado el partido. Es más, en el primer acto los de Nervión fueron incapaces de abordar a un equipo madrileño al que le costó un mundo crear peligro sobre la portería de Álvaro Fernández, pero que se defendió con orgullo e ilusión y que no pasó prácticamente apuros ante el bajo nivel de los de Pimienta. No tuvo que acabar muy contento el preparador catalán con los menos habituales que arrancaron de inicio, y que le dieron bastantes argumentos a su patrón de barco para que sigan teniendo el mismo rol en el plantel porque ninguno demostró virtudes para dar un paso al frente.
Eso sí, una cabalgada de un voluntarioso Idumbo cuando la primera parte agonizaba desembocó en un centro desde la banda derecha que un defensor local desviaba introduciéndolo en su portería. Ese gol de Luis Enrique en propia puerta ponía el 0-1 en el marcador antes del descanso y allanaba el camino sevillista.
Ya en el segundo acto emergió la figura y calidad de Juanlu, una gran acción individual suya le puso en bandeja el gol a Iheanacho, al que hasta entonces casi ni se le había visto y cuyas escasas intervenciones se habían resuelto de manera intrascendente. Pero los delanteros están para meter goles, da igual si son de rebote o cómo lleguen, y ese estreno del delantero nigeriano era uno de los objetivos principales del Sevilla FC en el partido. Enganchar a un ariete que aterrizaba en la capital hispalense con el crédito de una hoja de servicios en Europa notable, después de pasar por prestigiosos clubes, pero que buscaba reencontrarse con su mejor juego después de un último tramo de carrera en el ostracismo.
Kelechi se entonó y logró firmar su doblete en una acción de fácil resolución pero en la que estuvo en el sitio donde deben estar los delanteros para remachar las jugadas. Antes, un arrebato de los madrileños propició que tuvieran dos ocasiones que permitieron a Álvaro Fernández lucirse con dos intervenciones de nivel. Tercer objetivo cumplido para García Pimienta, que también buscaba que el guardameta encargado de sustituir a Nyland las próximas semanas cogiera confianza.
En definitiva, pase a la siguiente ronda obtenido sin brillo pero con las tareas cumplidas, que es lo que importa, y sin pasar los apuros que pueden producir estas rondas donde los equipos más humildes se ilusionan con derrocar a los más poderosos del fútbol español.