Investigadores de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla impulsan una base de datos pionera para estudiar el pasado del clima en la Tierra. Se trata de la iniciativa DOCU-CLIM, una apuesta internacional por armar una base de datos global en la que integrar y añadir «información paleoclimática» al alcance de toda la comunidad científica.
«Este ambicioso proyecto, que cuenta entre sus impulsores con el grupo de la UPO Vareclim, es protagonista del artículo ‘DOCU-CLIM: A global documentary climate dataset for climate reconstructions’ que ha publicado recientemente la prestigiosa revista Scientific Data. Entre sus autores se encuentra el profesor del Departamento de Sistemas Físicos, Químicos y Naturales de la UPO David Gallego, integrante del Grupo Vareclim para el estudio de la Variabilidad y la Reconstrucción del Clima, según informa la institución académica en una nota de prensa.
Este grupo, formado además por los investigadores Pedro Ribera, Cristina Peña-Ortiz, Nuria P. Plaza, María del Carmen Álvarez-Castro, Inmaculada Vega, Francisco de Paula Gómez y Veronika Hubert, constituye la representación de la UPO ante DOCU-CLIM.
La investigación paleoclimática, que recopila y analiza información sobre las características y evolución del clima pasado, resulta fundamental para entender sus dinámicas actuales, sobre todo en un contexto de crisis climática como el que vivimos. «Las reconstrucciones del clima son importantísimas para entender el clima presente, y sobre todo cómo está cambiando», afirma el profesor Gallego. Los hallazgos de estas investigaciones ofrecen perspectiva, puntos de referencia e indicios de cómo se ha comportado el clima en determinadas situaciones.
«Cuando se afirma que la temperatura media del planeta no ha alcanzado en los últimos 800.000 años un valor tan elevado como el actual, se hace basándonos en reconstrucciones del clima del pasado. Un ejemplo concreto de la utilidad de los registros documentales puede ser el caso de la sequía que asola desde hace décadas el Sahel, en el África subsahariana». Las observaciones meteorológicas que tomaron los miles de barcos que circunnavegaron África desde inicios del siglo XIX «nos han permitido comprobar que esta sequía no ha tenido parangón en al menos los últimos 200 años», añade el investigador.
PLATAFORMA COLABORATIVA
DOCU-CLIM se presenta como una plataforma colaborativa para que confluyan nuevos datos hoy dispersos, explotando así su potencial para la investigación paleoclimática. Tradicionalmente, las reconstrucciones climáticas se han basado en fuentes naturales, como los anillos de crecimiento de los árboles o la evolución del hielo fósil en un glaciar. Las fuentes documentales históricas como las de DOCU-CLIM, que pueden extraerse de periódicos, registros de la época o incluso diarios, revelan información nueva para lograr una fotografía más nítida.
En este sentido, el profesor Gallego subraya su uso por tener «una gran resolución temporal, a veces pueden llegar a dar información diaria, y cubren regiones del mundo donde no hay otras evidencias del clima del pasado». Para integrarlas correctamente y obtener información fiable, estos datos se someten a complejos procesos de verificación que cotejan las series reconstruidas con las observaciones de la meteorología actual, de acuerdo con criterios específicamente establecidos para cada tipo de formato.
Pero el gran éxito de DOCU-CLIM consiste «no solo en aportar información nueva, sino en aprovechar la que antes ya existía y no se procesaba». De etse modo, «muchas de las reconstrucciones del clima que antes estaban desperdigadas en páginas personales o departamentos universitarios, que no tenían formatos estandarizados o no estaban digitalizados, ahora son accesibles a cualquiera en una plataforma centralizada», cuenta Gallego.