La consejera de Salud y Consumo, Catalina García, ha querido transmitir «tranquilidad» a la población ante el aumento de la densidad de mosquitos transmisores del virus del Nilo en estaciones de trampeo en Málaga, Sevilla y Córdoba. Aunque se ha detectado este aumento, hasta el momento no se ha constatado que haya una transmisión activa del virus.
García destacó que en Andalucía se ha aprendido mucho acerca del virus del Nilo y que se ha establecido un protocolo importante en coordinación con los ayuntamientos, lo que permite una detección precoz cuando la circulación del mosquito aumenta significativamente en ciertas áreas, como se ha observado en Córdoba, Málaga y Sevilla.
La localización de las trampas se realiza en 27 municipios de Andalucía, tanto en áreas de alto y moderado riesgo, como en territorios con niveles de riesgo más bajos. El objetivo es detectar tempranamente el aumento de la densidad de mosquitos transmisores y la presencia del virus en ellos, para que la administración local pueda intensificar las acciones de vigilancia, control y comunicación en sus territorios y reducir así las posibilidades de transmisión a humanos.
La consejera enfatizó que gracias a las trampas implementadas desde hace dos años, tienen la capacidad de detectar precozmente el aumento de la circulación del mosquito, lo que permite a los ayuntamientos poner en marcha sus planes específicos dentro del protocolo establecido.
En conclusión, la consejera reiteró que es importante transmitir tranquilidad a la población, ya que los ayuntamientos están preparados para actuar de manera oportuna en caso de que la circulación del virus del Nilo aumente, activando sus planes de contingencia para proteger a la población.
