La Diputación de Sevilla, presidida por el socialista Javier Fernández, ha constituido este martes su Consejo Asesor de Cooperación al Desarrollo, dirigido por el diputado provincial de Empleado Público, Francisco Toajas, y con representación de todos los grupos políticos en la Institución Provincial, que son PSOE, PP, Con Andalucía y Vox.
Una vez constituido, el consejo ha aprobado la concesión de ayudas para la cofinanciación de la Diputación con los ayuntamientos y consorcios y con las ONGD para proyectos en países en vías de desarrollo, por importe de 1,09 millones de euros, tras haber admitido 26 proyectos municipales por importe de 403.889 euros para actuaciones solidarias en Haití, Malawi, República Democrática del Congo, Costa de Marfil, Perú, Paraguay, Bolivia, Nicaragua, Sahara Occidental, Guinea Bissau y Mauritania.
En lo que respecta a la cofinanciación de la Diputación con las ONGD, han sido aprobados 39 proyectos por importe de 686.269 euros, para actuaciones en Guatemala, Bolivia, Palestina, Malawi, Sahara Occidental, Sierra Leona, Paraguay, Mali, Mauritania, India, Guinea-Bissau, Chad, Colombia, El Salvador, Costa de Marfil, Nicaragua, Burundi, Uganda, Ecuador, República Democrática del Congo, Madagascar, Marruecos, Mozambique, Ruanda, Haití, Perú, Nicaragua, Líbano, Marruecos y Colombia.
Los ayuntamientos y consorcios participantes en la cofinanciación con la Diputación llevarán a cabo en Haití proyectos como asegurar la alimentación y la adquisición de libros de texto para el curso escolar en la escuela rural de Bois-Tombé; dentro del programa de desarrollo económico para la comunidad rural de Fondes-Blancs.
En Malawi ha sido cofinanciado un proyecto de mantenimiento de la guardería infantil y del taller de costura del hospital rural de Miale; el envío de un contenedor con ayuda humanitaria a hospitales y centros de salud rurales; la escolarización y formación a niñas adolescentes africanas; el suministro de equipamiento para el hospital rural de Kapiri-Pais y la reparación del acceso al hospital rural de Miale..
República Democrática del Congo recibirá de su lado proyectos como el equipamiento de recursos adecuados en la función educativa para el nuevo edificio Tokola Lisanga y el Centro Mere M. de Jesús; mientras en Costa de Marfil se llevará a cabo la campaña de vacunación contra la meningitis para la población infantil.
Perú recibirá por su parte un proyecto para el empoderamiento de la mujer del alto Amazonas y la construcción de una farmacia, así como la mejora del funcionamiento de los dispensarios la Wilaya de Dajla.
En Paraguay pesa un proyecto de alimentación y educación de los niños y niñas del vertedero municipal de Encarnación, mientras Bolivia se beneficiará del proyecto de mejora del derecho a la educación y alimentación de menores con discapacidad y dificultades del aprendizaje en Sacaba.
En Nicaragua figura un proyecto de fortalecimiento técnico operativo de capacidades de los bomberos de Managua, según la Diputación.
Para el Sahara Occidental, además, se han aprobado los siguientes proyectos: mitigación de las necesidades nutricionales de 100 menores saharauis de la guardería de la Daira de Hauza en la Wilaya de Smara durante el curso escolar; apoyo a la infancia saharaui refugiada con problemas de celiaquía y malnutrición; alimentación para la guardería y centro de educación especial en Wilaya de Dajla, en los campamentos de refugiados; proyecto de mitigación de déficit nutricional para las mujeres saharauis afectadas de anemia crónica; mejora de la dieta de los refugiados con aporte de proteínas mediante la distribución de huevos; mejora integral de las infraestructuras e implementación de buenas prácticas en la gestión del dispensario de atención primaria en la Wilaya de Dajla y dotación de equipamiento para la mejora del funcionamiento de los dispensarios.
Por último, para Mauritania ha sido cofinanciado un proyecto para el aprendizaje de políticas públicas locales de igualdad, destacando el diputado Francisco Toajas que «superadas las dudas jurídicas desde diversas instancias sobre la cooperación al desarrollo como competencia municipal, y constatando que se trata de una política pública local, competencia de los ayuntamientos, hay un extenso campo sobre el que reflexionar para abordar un nuevo marco estratégico para la cooperación descentralizada en la provincia».
