Sevilla muestra una ralentización de su economía motivada por las «tensiones geopolíticas» causadas por el conflicto entre Rusia y Ucrania y las «turbulencias» en los mercados financieros, cuya principal consecuencia es la caída del Producto Interior Bruto (PIB) más de tres puntos con respecto a 2022. Los expertos estiman que el PIB de Sevilla en 2023 se situará en un 1,6%, nivel «bastante inferior» al 2,4% y 2,3% estimados para España y Andalucía, y alejado del 4,9% registrado en 2022.
Ésta es la conclusión principal de la presentación este martes del XVIII Barómetro Económico de Sevilla, informe presentado por investigadores del Departamento de Economía de la Universidad Loyola en el Salón de Actos del Colegio Profesional de Economistas de Sevilla. «De la misma manera, la creación de empleo sufrirá una ralentización y pasará de un crecimiento del 6,8% registrado en 2022 a un 1,1% en 2023 y a un 0,4% en 2024. Por su parte, el Índice de Precios al Consumo (IPC) registraría una fuerte bajada desde un nivel muy cercano al 9% registrado en 2022 (8,6%) a niveles del 4% en 2023 y 3% en 2024», ha explicado Manuel Alejandro Cardenete, director ejecutivo del Barómetro Económico de Sevilla y catedrático del Departamento de Economía de la Universidad Loyola.
El Barómetro Económico de Sevilla nace de la colaboración entre el Colegio Profesional de Economistas de Sevilla y la Universidad Loyola hace cuatro años. En la presentación, también han estado presentes Francisco J. Tato Jiménez, decano del Colegio de Economistas; María del Carmen Delgado, directora adjunta del informe y directora del Departamento de Economía de la Universidad Loyola; y José María Vera López, subdirector general y director comercial de Caja Rural del Sur, según la información facilitada por ambas instituciones en una nota de prensa.
En cuanto al comportamiento del mercado laboral, se estima un menor crecimiento del número de ocupados para el 2023 y el 2024 después de haber experimentado la economía sevillana un crecimiento del 6,8% en el 2022. «La tasa de crecimiento de la población ocupada será inferior en la provincia en comparación con la que se estima a nivel nacional y regional. Por lo cual, el paro podría nuevamente subir al 17,5% en 2023 y 2024», ha detallado Manuel Alejandro Cardenete.
En cuanto a la inflación, los expertos estiman que en la provincia de Sevilla el IPC alcanzará un promedio anual del 4% en 2023, nivel ligeramente inferior al 4,1% estimado para la Comunidad Autónoma y superior al 3,8% nacional. En 2024, los modelos indican que el IPC cerrará en Sevilla en un 3%. «Esta variación en el nivel de precios se comprende por la disminución en la tendencia alcista del IPC sevillano desde octubre del 2022. A pesar de ello, la inflación seguirá siendo un factor determinante para el crecimiento de la actividad económica de la provincia», ha completado Manuel Alejandro Cardenete.
No todas las estimaciones son negativas para la economía sevillana. Los indicadores más relevantes para medir la actividad económica de la provincia han mostrado «una tendencia al alza» después de haber experimentado una «desaceleración» provocada por la pandemia y las «irregularidades» en el mercado «derivadas por las tensiones geopolíticas y el escalonamiento de la inflación».
Las pernoctaciones totales para Andalucía y Sevilla muestran una recuperación casi total del sector turismo. Sevilla ha conseguido registrar más pernoctaciones de enero a julio de 2023 que en el mismo período de 2019 con motivo de las fiestas primaverales sevillanas y la llegada del buen clima. Sin embargo, en los meses de junio y julio 2023, se ha registrado una «disminución estacional» de las pernoctaciones en la provincia con motivo del período estival.
En cuanto al sector exterior, el barómetro destaca que el saldo comercial fue de 108,93 millones en el primer trimestre de 2023. En el segundo trimestre de 2023, tanto las exportaciones como las importaciones han experimento un leve incremento, lo que se traduce en un aumento del saldo comercial (114 millones).
La confianza empresarial se ha recuperado, mostrando una tendencia al alza. Se recuperó en el año 2021 volviendo a niveles similares a la prepandemia. Aunque su evolución ha sido «irregular» durante 2022, los dos primeros trimestres de 2023 reflejaron una «tendencia creciente». «La senda de recuperación parece mantenerse y en el tercer trimestre de 2023 podemos seguir observando como aumenta», recoge el estudio económico.
Por otro lado, la creación de sociedades mercantiles en Andalucía y Sevilla venía mostrando una tendencia positiva. A pesar de haber alcanzado en mayo de 2023 niveles superiores a los niveles prepandemia, en junio de 2023 ha sufrido un fuerte descenso. Igualmente, continúa la tendencia negativa de las matriculaciones. En enero de 2023 mostró un «repunte» tanto en Andalucía como en Sevilla, pero desde dicho mes hasta verano de 2023 su tendencia es «decreciente». «Su evolución puede estar viéndose afectada por el incremento del precio de los carburantes, los tipos de interés de la financiación y el panorama de incertidumbre económica», ha aclarado María del Carmen Delgado.
En el segundo trimestre de 2023, el indicador sintético trimestral de actividad económica (Índice BES) se situó en 108,5 para Sevilla –frente al 101,3 del último trimestre de 2022–, y en 114,6 para Andalucía –frente al 103,8 del trimestre anterior–. Estos valores muestran que, si bien, desde el tercer trimestre de 2022, tanto la economía sevillana como la andaluza presentaban una ligera desaceleración, a partir del segundo trimestre de 2023 la tendencia parece «revertirse», repuntando significativamente, «más para la comunidad autónoma que para la provincia».