La Consejería de Fomento encarga la construcción de seis trenes, cinco para estar en servicio más un sexto que estará de reserva.
La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ha adjudicado por 32,5 millones de euros a la empresa CAF la fabricación y adquisición de seis trenes para el tranvía de Alcalá de Guadaíra. Esta inversión da continuidad a los trabajos de reparación, ya finalizados, de los daños causados por vandalismo, robo y expolio en el trazado. La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Marifrán Carazo, ha incidido en que este contrato certifica que “el tranvía de Alcalá no sólo se ha retomado sino que avanza decididamente para completar toda la obra civil”, a la par que ha recordado que a lo largo de este año “se van a licitar más actuaciones que, unidas a la compra de los trenes, suman en torno 176 millones de euros”.
“El proyecto está más que encauzado y ahora es el momento de ejecutar todos los fondos que hemos conseguido recuperar de la Unión Europea para encarar su puesta en servicio”, ha remarcado la titular de Fomento, que ha recordado que, además de este contrato, hace semanas se adjudicó el contrato de project manager para llevar un seguimiento y control exhaustivo de las obras, por 7,1 millones, y que en los próximos meses se sacará a concurso la obra de electrificación, sistemas ferroviarios y acabados arquitectónicos de paradas y estaciones, con un presupuesto base de 82,5 millones, y posteriormente la obra de talleres y cocheras, por 44,5 millones de euros.
El contrato recientemente adjudicado posibilitará, por tanto, la fabricación y adquisición de seis trenes, de los que cinco estarán en servicio y un sexto estará en talleres y cocheras para prestar un servicio sincronizado con la línea 1 del Metro de Sevilla –con el que conectará en la estación de Pablo de Olavide– y con una frecuencia prevista de paso de nueve minutos. Además del suministro de estos trenes, también se realizarán las pruebas y ensayos en fábrica sobre materiales, equipos y el material móvil, así como las pruebas en blanco (sin viajeros) de las unidades fabricadas. Igualmente se incluirá la formación del personal de explotación (conductores) y de mantenimiento de los trenes, además de suministrar las piezas de parque, repuesto y herramientas especiales necesarias para alcanzar los niveles de disponibilidad exigidos para su explotación durante cinco años. Por último, se responsabilizará del mantenimiento integral de la flota durante un periodo de garantía de dos años.
El actual Gobierno andaluz siempre ha apostado por la reactivación de las obras del tranvía de Alcalá de Guadaíra, un proyecto que se remonta a hace más de 20 años y cuya ejecución ha estado marcada por los retrasos, los contratiempos y las paralizaciones, que ha supuesto un importante sobrecoste: se inició en 2007, se paró en 2011 bajo el argumento de la crisis económica, se volvió a reanudar en 2015 y, de nuevo, se paralizó en 2018.
Nada más llegar el Gobierno de Juanma Moreno, a principios de 2019, la Comisión Europea envío una carta en la que se retiraba la financiación del tranvía ante las dudas generadas en anteriores mandatos en torno al proyecto. Los responsables de la Consejería de Fomento decidieron entonces retirar el proyecto para empezar de cero y presentar un nuevo proyecto, con mayores garantías, que sí logró el visto bueno de la Comisión Europea, hasta el punto de obtener la catalogación de Gran Proyecto. A partir de ahí, se han empezado a ejecutar los contratos, siendo el primero de ellos el de la reparación de todo lo vandalizado por 4,3 millones de euros.