El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha anunciado que la línea 2 de Tussam incorporará su paso por el Parque Científico Tecnológico Cartuja a partir del próximo 6 de marzo. Son cuatro kilómetros más y seis paradas, con una distancia entre ellas de 730 metros. Irán ubicadas en el Pabellón de Andalucía, la Escuela Superior de Ingeniería, la Facultad de Comunicación, el edificio Luis Braille, Monasterio de la Cartuja y Torre Sevilla. Con esta mejora del servicio de transporte público, el Ayuntamiento defiende la «implantación progresiva» de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en Cartuja, en vigor desde el pasado 1 de enero de este año.
Así lo ha confirmado el regidor hispalense en el Pleno municipal de este jueves a preguntas del portavoz de CS, Miguel Ángel Aumesquet, que ha referido que esta Zona de Bajas Emisiones se ha convertido en la «principal crítica» de los empresarios de este recinto y de los usuarios. Muñoz ha defendido pasar «del discurso a las medidas concretas», así como ha pedido «coherencia» y «no recular» ni que «tiemblen las piernas» cuando el discurso contra el cambio climático se traduce en medidas concretas con las que frenarlo.
Frente a la «imprevisión» que le ha afeado CS a la Delegación de Gobernación, Fiestas Mayores y Área Metropolitana, el alcalde ha argumentado que «si hay una zona que debe comprometerse» con este tipo de actuaciones es la Cartuja. Ha reconocido que la «transición» a un modelo menos dependiente del vehículo privado requiere de un «cambio de conducta» de los ciudadanos. Ha recordado que la ZBE de Cartuja tiene «muchísimas excepciones» en cuanto a los vehículos que están autorizados a pasar y ha anunciado que la segunda fase, con cámaras ya, será «más estricta en cuanto al control».
Esta Zona de Bajas Emisiones (ZBE) trata de «reducir o disuadir» del uso de vehículos contaminantes restringiendo el acceso a la misma, en cumplimiento de la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética, cuyo Real Decreto, en una disposición transitoria, establece un plazo de 18 meses para que los proyectos se adapten a este desarrollo completo de la normativa estatal, ha puntualizado el Consistorio en una nota de prensa.
El Ayuntamiento ha ofrecido «tiempo suficiente» para acreditar a aquellos vehículos que no cumplan los requerimientos ambientales y que necesiten autorización expresa para acceder a Cartuja, donde, según los datos ofrecidos este jueves por el alcalde, hay 3.400 plazas de aparcamiento y otras 3.665 en aparcamientos privados. Esta primera fase define dos áreas específicas en Cartuja donde, con carácter general, podrán circular sin restricción alguna ni registro previo todos aquellos vehículos con distintivo ambiental B, C, Eco y Cero Emisiones, de acuerdo con la clasificación recogida en el Reglamento General de Vehículos.
El resto, es decir, aquellos con la etiqueta A –coincide con vehículos de gasolina matriculados antes del año 2000 y diésel anteriores al año 2006– no podrán circular por la ZBE en el horario fijado y deberá hacer uso, por tanto, de los aparcamientos habilitados a la entrada de Cartuja, salvo una serie de excepciones que tratan de garantizar la actividad en el interior de Cartuja, el transporte público o los servicios de emergencias.
