Tras la desastrosa goleada recibida en el Civitas Metropolitano, el Sevilla FC ha amanecido con la pequeña noticia positiva de que uno de sus futbolistas más importantes, el francés Loïc Badé, está acortando plazos de recuperación para volver esta semana a pisar el césped del Sánchez-Pizjuán, bien ante el Fenerbahçe en Europa League o ante el Almería en La Liga.
La vuelta de Badé se antoja clave para que el Sevilla recupere la cierta solidez defensiva que tenía en enero y que ha perdido en los últimos tres partidos, habiendo encajado12 goles en estos tres encuentros. Badé cayó lesionado en el partido de ida de la eliminatoria ante el PSV con un problema en el bíceps femoral izquierdo que en principio le iba a tener más tiempo de baja que el previsto, pero la situación defensiva del Sevilla ha provocado que el francés haya tenido que acortar plazos para estar disponible lo antes posible.
Desde la lesión de Badé el Sevilla ha ido perdiendo efectivos a cuenta gotas en la defensa. Desde las recurrentes bajas por lesión de Marçao y Rekik hasta la sanción de cuatro partidos para Fernando Reges, el Sevilla se ha quedado sin efectivos en la línea de centrales quedando sano un único central puro (Nianzou) y dos parches como Gudelj y Telles.
La idea tanto del club como del jugador es volver a más tardar en el decisivo encuentro que disputará el Sevilla ante el Almería este próximo fin de semana, con la figura de su entrenador cuestionada y la sombra del descenso acechando Nervión, aunque si se nota sin molestias a lo largo de la semana podría volver ante el Fenerbahçe el jueves en la Europa League. Todo dependerá de la evolución física del futbolista y la cantidad de entrenamiento que complete esta semana.
