Agentes de la Policía Nacional en Sevilla han detenido a once personas, en el marco de una operación denominada Palma, acusados de vender diferentes tipos de drogas en un ‘fumadero’ en el que ofrecían «todo tipo de comodidades» para su consumo. Los arrestados han sido puestos a disposición de la autoridad judicial por un delito contra la salud pública en su modalidad de tráfico de drogas.
El operativo se inició hace un mes cuando agentes especializados en este tipo de delitos, durante sus labores de prevención, detectaron un «alto trasiego de personas» que se introducían en un edificio de la calle Hermano Pablo de la capital andaluza, según informa la Policía en una nota de prensa.
Fruto de la investigación, los agentes comprobaron que el lugar se usaba como ‘fumadero’, lugar al que acudían consumidores de sustancias estupefacientes, donde además de adquirirlas, «se les facilitaba su consumo en el interior del mismo ofreciendo todo tipo de comodidades».
La Policía llevó a cabo un registro docimiliario en la vivienda en cuestión y halló «una gran resistencia por parte de los ocupantes», que trataron de impedir la entrada a los actuantes «cerrando la puerta acorazada del piso con dos barras de refuerzo para intentar librarse de las sustancias estupefacientes que se hallabann en el interior».
Los agentes encontraron en el domicilio cocaína, heroína, una balanza de precisión, una máquina tragaperras, un televisor dispuesto con asientos y unos 570 euros en metálico. El operativo se saldó con la detención de diez individuos, que fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, que decretó el ingreso en prisión para tres de ellos.
SEGUNDO PUNTO DE VENTA DE DROGAS
Los investigadores corroboraron la actividad ilegal de otro punto de venta, por lo que el pasado 15 de abril detuvieron a una persona tras ser sorprendida ‘in fraganti’ vendiendo droga. El arrestado ofreció una «férrea resistencia», lo que provocó lesiones de diversa consideración a los agentes.
Tras la intervención de los agentes en la citada operación y una vez puesto a disposición judicial, se decretó su ingreso en prisión.