La coalición liderada por Podemos e Izquierda Unida para las elecciones municipales del 28 de mayo ha anunciado que incorporará un plan de mejora integral para la barriada de La Bachillera en su programa electoral. El objetivo del plan es incrementar los niveles de bienestar de los vecinos y equipararlos al de otros barrios que cuentan con niveles adecuados de equipamiento e infraestructuras.
La candidata a la Alcaldía, Susana Hornillo, y el número dos de la confluencia, Ismael Sánchez, han visitado la barriada en compañía de vecinos para conocer de primera mano los problemas cotidianos que no han recibido ninguna solución por parte del Ayuntamiento en los últimos doce años. Entre las prioridades señaladas por los propios afectados se encuentra la necesidad de lograr la propiedad de los suelos sobre los que se han construido sus viviendas, de tal manera que adquieran el rango de propietarios a todos los efectos.
En la actualidad, centenares de inmuebles se ubican en emplazamientos titularidad de Renfe y organizaciones sociales, lo que impide la plena reglamentación de los mismos y la consecución de permisos y licencias para obras o actividades económicas. Desde la confluencia, se han comprometido a liderar un procedimiento legal que concluya con la obtención de la ansiada titularidad de los vecinos, normalizando la vida en estas residencias que fueron construidas hace décadas en circunstancias de alegalidad.
Además, los candidatos de la confluencia también se han comprometido a impulsar un nuevo planeamiento urbanístico de la barriada que, a medio y largo plazo, consolide espacios públicos acordes a la normativa vigente y dote de suelos a la barriada para la creación de equipamientos municipales como zonas verdes y pistas deportivas públicas.
La Bachillera representa uno de esos barrios olvidados por la administración que puede y debe recibir el impulso necesario para garantizar que los vecinos y vecinas de Sevilla gozan de buenos servicios públicos independientemente de su código postal, han apuntado desde la coalición impulsada por Podemos e Izquierda Unida.
Por último, desde el equipo de la coalición también han prometido eliminar las torretas de alta tensión que atraviesan la barriada y conviven con residencias particulares, convirtiéndose en un lastre para el desarrollo de la zona y suponiendo un peligro público para todo el entorno ante la posibilidad de accidentes en su estructura.
