El portavoz adjunto del grupo Con Podemos-Izquierda Unida, Ismael Sánchez, ha exigido este martes al Gobierno municipal que actúe ante la «escandalosa ocupación del espacio público» que sufre la ciudad «por parte de la actividad hostelera», un «problema» que se concentra «con especial gravedad en determinados puntos del casco histórico».
Según ha expuesto en una nota de prensa, el Ayuntamiento «es responsable del caos generado en la convivencia por prorrogar la resolución que permite ampliar los veladores de bares y restaurantes, una resolución que se refiere al ya extinto Estado de Alarma, y que vulnera de manera flagrante normativas locales como la Ordenanza Municipal para la Accesibilidad Universal».
Entre los ejemplos más destacados «de ruptura de la convivencia y continuas barreras a la movilidad universal», Sánchez ha señalado enclaves como la Plaza del Pumarejo, «invadida en más del 70 por ciento por veladores»; el barrio de Santa Cruz, que concentra espacios de veladores «que imposibilitan el acceso de los servicios de emergencias»; el barrio de la Alfalfa, «cuyas plazas han dejado de ser accesibles como resultado del incremento masivo de veladores» o el barrio del Arenal, afectado «de manera severa» por los restaurantes del entorno.
Ante esta situación, Sánchez ha anunciado que su grupo municipal llevará una iniciativa a la próxima sesión de la Comisión de Control y Fiscalización para reflejar el «malestar ciudadano» y demandar soluciones que permitan poner fin a la «usurpación» del espacio público y se garantice la compatibilidad de la actividad hostelera y la convivencia vecinal.
En este sentido, desde el grupo Podemos-Izquierda Unida han subrayado el «importante movimiento vecinal» que denuncia el «caos de la convivencia» en la ciudad y ha exigido al Gobierno de José Luis Sanz que cualquier modificación en las normativas que se acometa «cuente con la participación y visto bueno» de los colectivos en defensa de la accesibilidad universal y «de la sana convivencia en la ciudad».
El Gobierno municipal anunció a finales de agosto que mantendrían los veladores que se ampliaron durante la pandemia del coronavirus, que era una de las medidas de apoyo al sector, hasta que se aprobara la nueva ordenanza, en la que ya se está trabajando, «con el único objetivo de que en un plazo de seis meses se apruebe de forma inicial este texto tan necesario para acabar con la inseguridad jurídica».
