El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha celebrado un encuentro con la plataforma ciudadana Pro túneles SE-40, contraria a la decisión del Gobierno central del PSOE y Sumar de sustituir por un puente los túneles inicialmente previstos para el trazado de la autovía metropolitana SE-40 comprendido entre Dos Hermanas y Coria del Río, bajo premisas como que la opción del puente es más económica y rápida. Sanz la Plataforma Pro túneles SE-40
El encuentro se ha celebrado tras la reciente publicación de la declaración de impacto ambiental (DIA) del nuevo anteproyecto del tramo de la autovía metropolitana SE-40 comprendido entre Dos Hermanas y Coria; que se decanta por la alternativa A con más de cinco kilómetros de trazado, 3,2 de ellos materializados en un puente sin pilas en el cauce del Guadalquivir y de más de 70 metros de gálibo.
Al respecto, Sanz ha manifestado que sustituir los túneles inicialmente previstos por un puente supone «una tomadura de pelo después de casi 30 años que perdidos y más de 100 millones de euros que ha costado la compra de la tuneladora y su mantenimiento».
Sanz se reúne con la Plataforma Pro túneles SE-40 y avisa de que el puente es «una tomadura de pelo»
Así, ha criticado esta decisión del Gobierno central del PSOE y Sumar, promotor de un nuevo estudio informativo para este tramo de la SE-40, que apostaba ya por la opción de sustituir por un puente los túneles contratados en 2009, cuya ejecución quedó paralizada poco después de comenzar las obras, en el marco de la gran recesión y la cruda asfixia económica de las administraciones públicas. NOTICIAS SEVILLA
Las obras de los túneles habrían sido suspendidas en 2010 por el entonces Gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, sin que el Ejecutivo del popular Mariano Rajoy retomase las obras en sus siete años de gestión, apostando el actual gabinete de Pedro Sánchez por un nuevo estudio informativo que incluía la opción del puente, bajo la premisa de que el proyecto original de los túneles resultaría inviable al ser detectado un grado de permeabilidad de los suelos superior al inicialmente previsto.
Y especialmente, el Gobierno admitía ya años atrás, al plantear el nuevo estudio informativo, que la solución del puente reduciría la inversión necesaria a unos 458 millones de euros frente a los 1.077 y 1.826 millones de las opciones de túneles y que el puente podría estar quizá listo en 2028 y los túneles entre 2032 y 2036.
Sanz ha criticado además el «impacto medioambiental de miles de camiones superando una pendiente del cinco por ciento desplazándose por el puente», lo que le ha llevado a considerar que la opción del viaducto no es «sostenible».