Un equipo de investigadores del Centro Andaluz de Biología del Desarrollo (CABD-CSIC-JA-UPO) ha descubierto que las proteínas YAP, que pertenecen a una familia de activadores transcripcionales implicada en el correcto mantenimiento de los tejidos adultos y en el proceso de embriogénesis, son fundamentales para la correcta formación del embrión in vivo. Los resultados del trabajo, que aparecen publicados en la revista ‘Nature Communications’, podrían servir para detectar dianas terapéuticas frente a enfermedades como la metástasis incontrolada, entre otras.
Durante la gastrulación, una etapa crítica del desarrollo, ya que se define el plan de construcción del futuro organismo, es cuando la masa inicialmente amorfa de las células precursoras se condensa en el eje central del embrión y se decide qué va a ser anterior y qué posterior, qué dorsal y qué ventral, según ha explicado el CSIC en un comunicado.
La investigadora del CSIC en el CABD, centro mixto del CSIC, la Junta y la Universidad Pablo de Olavide (UPO), María Almuedo-Castillo, ha afirmado que «nuestro trabajo describe el papel de las proteínas de la familia Yap durante estos movimientos de gastrulación». «La función de Yap es, al mismo tiempo, generar y detectar tensión intracelular específicamente en las células que migran hacia la línea media del embrión y mantenerla estableciendo un mecanismo mecano-regulador de retroalimentación positiva», ha señalado.
Sin Yap, las células no son capaces de migrar a sus destinos finales y el eje del embrión no se forma. «Nosotros identificamos a Yap como el responsable de encender un programa transcripcional que es necesario para garantizar la migración celular durante la gastrulación», ha indicado Almuedo-Castillo.
De otro lado, uno de los coautores del artículo e investigador CSIC en el CABD, Juan R. Martínez-Morales, ha remarcado que «identificar las señales responsables de la migración celular, especialmente aquellas que dependen de fuerzas mecánicas, es importante, no sólo para entender las bases de la formación de embriones y órganos, sino también para identificar las dianas necesarias para luchar contra procesos de migración incontrolada como es el caso de la metástasis cancerígena y otras muchas enfermedades relacionadas con problemas durante el desarrollo embrionario.